Magnetismo

Magnetismo

El magnetismo es un fenómeno físico, por el cual ciertos materiales ejercen fuerzas de atracción o repulsión sobre otras.

Dentro del magnetismo podemos encontrar diferentes sustancias:

Sustancias ferromagnéticas: son componentes que se magnetizan y se transforman en imanes al estar en contacto con otros imanes. Presentan ferromagnetismo (propiedad que depende de la composición química del material). También, con el tiempo, las sustancias pueden ser duras (ordenamiento permanente) o blandas (ordenamiento temporario). Ejemplos: cobalto, níquel, hierro y ciertas aleaciones.

Sustancias diamagnéticos: reaccionan de manera opuesta a las sustancias ferromagnéticas, repeliéndose. Ejemplos: sal de mesa, grafito, hidrógeno, agua, etc.

Sustancias paramagnéticos: son ciertos componentes como el aire, el aluminio o el magnesio que al estar cerca de los imanes se imantan temporariamente.

También los imanes se pueden clasificar según su duración:

Los imanes temporarios se comportan como imanes por un periodo breve y únicamente ante la presencia de un imán. No los utilizamos normalmente y están presentes en la naturaleza.

Imanes permanentes: Materiales que una vez que han sido magnetizados, estos permanecen con carga magnética a lo largo del tiempo. Son los que vemos, los que utilizamos normalmente y también se los puede crear; pero requiere de alguna sustancia magnética.

Estos pueden desmagnetizarse a causa de la temperatura Curie es aquella que provoca el desorden de los dominios (varía según el material). Esta establece el límite por encima del cual un material magnético se desmagnetiza. En el caso de un imán cerámico es de 450ºC y de 800ºC cuando se trata de un imán de cobalto. También podemos golpearlo repetidas veces y de ese modo desordenar los dominios lo que provoca un desorden microscópico que se traduce con la de alineación de los dominios magnéticos, y de ese modo se provoca la des magnetización.